Vida Casquivana: Lunch time!

La hora de almuerzo

Para los que viven en Santiago es casi imposible pensar en almorzar en sus casas (como extraño eso!) y la hora de almuerzo entre lunes y viernes (o lunes a jueves en mi caso) siempre trae consigo uno que otro problema o más bien una incertidumbre: ¿qué comer? ¿dónde ir? ¿con quién almorzar? Son algunas de las preguntas que cruzan la cabeza cuando se acerca el medio día.

Hay ciertos trabajos en que te permiten almorzar en la oficina o mejor aún, han habilitado un área especial para que los empleados almuercen, mientras que en otros lugares no está permitido hacerlo y las alternativas son o te quedas trabajando o sales a almorzar (en  mi caso siempre elegiriá la segunda opción).

Si almuerzas en la oficina una opción es pedir comida, aquí el abanico de alternativas igual es amplio, desde comida chatarra (pizzas, sandwichs, etc) hasta los “datos” de la señora que hace comida casera y la lleva a la oficina por precios bastante convenientes. Otra opción si tienes la posibilidad de calentar es preparar tu propio almuerzo y llevarte todos los días tu pote plástico al trabajo y te aseguras de comer algo sano y rico.

Salir a almorzar implica un gasto mayor, aquí los famosos “cheque restorán” son más que bienvenidos, te olvidas de cocinar o de hacer un “esfuerzo económico” para poder almorzar, sólo tienes que encontrar un lugar (o lugares para ir variando y no aburrirse) que te acomode en precio, calidad y rapidez, sí rapidez, porque en la semana laboral no tienes más de una hora para ir al lugar, encontrar mesa, pedir, comer, pagar y volver al trabajo, así que la rapidez del servicio no es menor.

En mi caso tenemos un pequeño comedor en la oficina y además un cheque restorán diario, así que alterno todas las alternativas según tenga o no ganas de cocinar, si me da lata salir o hace mucho frío.

Otra dificultad es encontrar buenos partners de almuerzo para que el momento sea agradable y de relax y no terminen discutiendo cosas de trabajo en una hora que se supone es de descanso, tampoco faltan los típicos lateros o los que viven quejándose de su trabajo y terminan amargando la comida del resto (mejor evitarlos), lo que si no me gusta afuera sola, así que si no hay grupo tendré que comparar una ensalada en el boliche de la esquina (léase starbucks) y traerla a la ofis.

Como dato-consejo les puedo decir que traten de almorzar al menos una vez a la semana con alguna amiga/o que no sea de tu trabajo, aparte de la buena compañía te dará la sensación de que es como un almuerzo de día sábado.. ojo, nada de deprimirse cuando vuelvan al trabajo…jejej

Y ustedes… qué hacen a la hora de almuerzo?

Por Malú