Datos casquivanos: Golfo di Napoli

El verdadero sabor italiano

 (Gnoquis al pesto)

Crecí con las comidas de la nona... pastas caseras, lasaña hecha en casa desde cero (no esas donde compras la pasta precocida), risotto, gnoquis, etc, la idea se entiende. Por lo mismo me cuesta encontrar bueno un restorán de comida italiana, los risottos nunca están bien cocidos y casi todos tienen ese gusto de caldo maggi, las pastas son 4 cuadrados rellenos con cualquier cosa flotando en una salsa tan hostigosa que se te olvida lo que estás comiendo.

Lo otro que me gusta son las buenas picadas, esas donde el sabor de los platos te hace subir al cielo, la atención el cálida y los precios son demasiado convenientes. Fue en esta búsqueda de dónde comer unos tallarines caseros o unos  buenos gnoquis que alguien le pasó a F el dato: "Tienen que ir al Golfo di Napoli".

Ojo que este lugar no es para los que buscan la paz y elegancia de los restoanes de mantel largo, tampoco encontrarás nada de autor (salvo el jugo multifrutas de la casa), nada de mezclas raras ni promiscuidad en los platos, aquí solo sale de la cocina lo tradicional y el ambiente también evoca una típica reunión de esas numerosas familias italianas: ruidos, gritos, llantos, risas y brindis, todo mezclado con el traqueteo de los platos y al calor del horno de donde salen las más deliciosas pizzas y lazañas.

Como toda buena picada que se precie de tal, la fama transmitida de boca en boca hace que la demanda por una mesa sea una odisea, no aceptan reservas salvo ocasiones especiales y grupos grandes, así que hay que armarse de paciencia (o ir muy temprano) y anotarse con Vincenzo (el dueño) al llegar (el maneja la lista, vigila la cocina, a los garzones, asigna las mesas, hace de recepcionista y te da la despedida).

Bueno, estás ahí, esperaste y por fin tienes una mesa. Obviamente los manteles son a cuadros y para entretener el estómago nada de pancitos con mantequillas especiadas... no... aquí lo que hay es recortes de los bordes de pizzas (mmm.. deliciosos...) y ricotta para untar... recomendación: no coman mucho, mejor dejar espacio para el plato. Tampoco hay nada de aperitivos ni otras siutiquerías, esta es una trattoria y si quieres algo antes del plato de fondo pide una pizza para compartir.

Ya de tanto pensar en la comida me está dando hambre... no hay nada más que les pueda decir, solo vayan, prueben y juzguen por ustedes mismos, de seguro que volverán.

La dirección es: Irrarázabal 2423, Nuñoa, Santiago.

Por Malu