Actitud Casquivana: La vida te da sorpresas

Sorpresas te da la vida

Anoche vi el comercial del programa “Esta es mi familia” donde sale la mamá de Kevin Silva diciendo que ellos eran una familia normal, felices y muy unidos pero el día de la maratón de Santiago cuando su hijo Kevin salió a la calle, fue atropellado por un auto. Kevin perdió sus piernas a causa del accidente y obviamente la vida de toda la familia cambió para siempre.

Que terrible historia, pero ni Kevin ni su familia se dejaron vencer por este obstáculo proporcionalmente mucho mayor a los obstáculos que nos pone la vida diaria y que a veces nosotros sentimos no tener la fuerza para superar. Este adolescente, con la ayuda de su familia y de muchos, muchísimos desconocidos que antes no tenían idea de que èl existía, se ha propuesto no solo recuperar su vida anterior, sino volver a caminar y está dispuesto a trabajar duro para lograrlo.

Pero la historia de Kevin no es única. Todos los días comenzamos el día y salimos de casa dispuestos a seguir la rutina del día a día, al metro, el trabajo, la escuela, etc. y damos por sentado que todo sucederá como siempre y volveremos a casa sin alteraciones...y el 90% de las veces sucede así. Pero queda el 10% que no sabemos si va a ser bueno o no tanto...ese 10% que no te garantiza que todo saldrá según lo esperado y por eso tienes que estar preparado y alerta y sobretodo aprovechar los momentos y a las personas que tienes a tu alrededor y que te hacen felíz.

El dicho “uno propone y Dios dispone” resulta cierto hasta para los ateos que tampoco tienen una bolita mágica para ver si en el futuro todo saldrá exactamente como lo han planeado. En Abril de este año salí de casa en auto para ir a clase de danza árabe, casi nunca voy en auto porque está cerca de mi casa  pero esa vez manejaba hasta allá porque tenía planeas para después de clase y estos incluían el auto. Llevaba mi maleta para cambiarme después de clase, tenía cronometrado el tiempo que me llevaría encontrarme con mis amigas para ir al carrete...en fin, todo planeado y en el segundo semáforo después de salir de mi casa: choqué. Al tacho de la basura los planes.

Por supuesto que esto nada tiene que ver con lo que le pasó a Kevin, pero trataba de ilustrar como a veces nos suceden cosas completamente inésperadas que nos cambian los planes. Aunque por otro lado no todas las cosas inésperadas son malas, imaginen el vuelco de vida que tendrá la persona que se ganó el lotto anoche!

Por eso nuestro consejo es que tengas cuidado, que te prepares mental y espiritualmente para momentos inesperados que la vida te da y que aproveches cada momento con tus seres queridos porque uno nunca sabe qué puede pasar. Sin ánimo de ser fatalistas por supuesto, pero ¿no es mejor eso que luego arrepentirse por algo que no dijiste/hiciste y que ya no tiene remedio?. No hay mejor momento que ahora mismo!

*Por Mara