Las que siempre ves
Ayer mientras planchaba abnegadamente las camisas de El Esclavo (una vez más, quién es esclavo de quién) hacía zapping en la tele para entretener la mente y me encontré con el final de “Novia Fugitiva” en la parte donde Julia Roberts se pone de rodillas para pedirle matrimonio a Richard Gere con un diálogo que comienza “te garantizo que habrá días difíciles, y te garantizo que en algún punto del camino, uno o ambos vamos a querer abandonar esto...” y un largo etc. super romántico y mielero. Obviamente me quedé viéndolo hasta que termino y ellos salen a caballo galopando contra el viento mientras se ve la cola del vestido de novia de ella (suspiro).
Hay escenas de películas que no podemos dejar de ver, aunque ya las vimos mil veces antes y las sepamos de memoria. ¿No les pasa que a veces ponen la tele para tener ruido de fondo y están concentradísimas haciendo otra cosa pero igual giran la cabeza para ver cierta escena de una película? O también puede pasar que sabemos exactamente lo que va a suceder a continuación, pero igual nos sobresaltamos cuando sale el asesino o lloramos cuando el protagonista muere.
Por lo general a mí me sucede con los finales o los casi finales, pero hay escenas del medio que también me hacen detener cualquier cosa que esté haciendo para ir a verlas, como la pelea en la nieve con las espadas chinas de Kill Bill. Otra de mis favoritas es la escena del primer baile de Elizabeth Bennet y Mr. Darcy (versión nueva, donde todos a su alrededor desaparecen) y de la misma película, una escena donde están todas las mujeres Bennet haciendo nada en el salón pero al anunciarse el Sr. Bingley todas se componen en tres tiempos y cuando él hace su entrada ellas están lo más formales y listas del mundo como por casualidad”.
Estoy segura de que todas tenemos una o varias escenas favoritas de películas, y de que no nos sucede solo a las mujeres, los hombres tienen sus favoritas también. Lo que sucede con estas escenas es que nos producen una emoción profunda, ya sea que nos hacen suspirar, o llorar, o reír a carcajadas o nos recuerdan a alguien. Son la emoción y la memoria las que juegan un papel preponderante en el cine y por supuesto esta reacción depende de cada persona, sin embargo hay escenas que son memorables para mucha gente al mismo tiempo, o que forman parte de una cultura o idiosincracia (por ejemplo “Yo soy tu padre” de La Guerra de las Galaxias, que se ha usado hasta para portada de The Clinic).
Mi escena favorita por excelencia, la que les gana a todas, es ver a Meryl Streep cantando Mamma Mía sobre el techo en la película del mismo nombre. Uno, porque es mi actriz favorita, dos, porque es un lujo verla cantar a pesar de que no es lo suyo, y tres, porque es hilarante y al mismo tiempo tierna. ¿Ustedes tienen escenas favoritas de películas? Compartanlas con nosotras y diganme si son igual de cheese que las mías o soy la única chiflada.
*Por Mara