En las trincheras del mundo laboral
Ayer escuchaba una conversación entre mujeres adultas que ya llevan sus años en el mundo laboral (sus buenos años) y aunque ambas tienen profesiones distintas y una se desempeña en el sector público y la otra en el privado, ambas compartían una experiencia muy similar, ambas habían tenido problemas laborales relacionado con las relaciones personales. Una de ellas siendo jefa había sido traicionada maliciosa y públicamente por un par de subordinados mientras que la otra es víctima de algunas colegas que literalmente le declararon la guerra.
Hay que reconocer que todo el mundo tiene alguna vez un encontrón en la pega, con algún compañer@ ya sea del mismo departamento o de otra área, con subordinad@s o con la/el jefa/e, porque es obvio que así como la familia, uno no elige a sus compañeros de trabajo, pero cuando el tema va más allá de un simple desacuerdo o “intercambio de opiniones” hay que poner ojo.
Estas declaraciones de guerra pueden ser tan sutiles como que alguien solamente hable mal de ti hasta más agresivas llegando incluso a boicotear tu trabajo. Esto me lleva a la pregunta ¿por qué esta gente se empeña en dañar a otros? ¿Qué ganan?
Siempre habrá gente maintencioanda en nuestras vidas o quienes estén listos para tratar de pisotearnos y encaramerse sobre nosotras (para ellos es la única posiblidad de ascender). Así que hay que estar preparadas para todo, no dejarse estar y salir más fuerte de la situación, recuerden … lo que no las mata las hace más fuertes.
Nada de hacerse la mina, aquí hay que enfrentar las cosas y no tener pena por esa o esas personas que te hacen daño, a veces las chicas por ser conciliadoras o poco confrontacionales permitimos que nos pisoteen o que alguien nos trate mal (fíjense, eso pasa siempre cuando andamos disculpando la mala conducta de alguien).
Después de revisar la web, todos los sitios que hablan sobre el tema coinciden que se trata de personas inseguras, con problemas de manejo de la ira, dominados por la envidia y los celos profesionales y por supuesto la recomendación de todos es enfrentar el problema desde el principio y no ser pasivos con estas agresiones (uno de los mejores artículos que encontré, con buenos datos para identificar y lidiar con personas conflictivas se llama Trabajando con el Enemigo, les recomiendo que lo lean).
A mi personalmente no me ha tocado nada tan grave como los casos de las chicas que comentaba al principio, pero como servicio de utilidad casquivana nos gustaría que nos contaras tus experiencias al respecto...
uyyy que cierto eso de como la familia, no podemos elegir a los compañeros de trabajo..., hay que aprender a vivir con ello. En todas las organizaciones existen trepas, que no conocen algo llamado ética profesional.
ResponderEliminarSólo queda pensar positivo que las cosas decantan, más tarde que nunca.
Sabes....gracias por tu aporte y sobre todo por el articulo....resulta revelador, por decirlo de alguna manera.....de ahora en adelante me fijare en tod@s l@s que me rodean y no podré vivir nunca mas con tranquilidad......jajajajajaja(broma)…....hablando en serio, creo que debemos empezar clasificándonos nosotros primero, no para justificarnos, sino que, para aprender de nuestros errores, relajarnos en el trabajo y no creer que debemos conseguir todo...cueste lo que cueste......y saber que al fin del día , no es mas el que te ha aporreado, sino, el que se ha dado cuenta de la pobreza espiritual del que te quiere dañar...........esopino...
ResponderEliminarPuxaaa que son fomes nadie contó ninguna historia, aqui les va la mía:
ResponderEliminarLlegó este año una compañera al hospital y muy caguinera, me hartó y eso que yo tengo bastante paciencia.
Le dije que yo llevaba 4 años y ella recién llegaba.Que si seguía hablando mal de mi en mi servicio o en otros lados la única que iba a quedar mal era ella.
Ahora las cosas están un poco mejor, pero ella en verdad está loca y es demasiado insegura.
Saludos y lo que no nos mata, siempre nos fortalece.
Sara @laopinante