¿Motín a bordo?
Para los que están prontos a viajar, Malú nos deja estas reflexiones que acudieron a su mente mientras cruzaba el Atlántico el 1 de Enero de este año, en un vuelo de 15 horas, con la caña de la fiesta de Año nuevo y en manos de una de las peores aerolíneas de este planeta (si, la misma que hizo noticia hace pocos días por mandar a arrestar a una ex-miss que les puso los puntos sobre las íes).
Odio a mi vecino de asiento, lo odio desde el primer momento en que lo vi, es mas, creo que lo odio desde antes que nos encontráramos.
Por lo mismo también odio al tipo del counter por darnos estos asientos, como si ya volar 13 horas mas otras 3 extra de la conexión no fuera suficiente, nosotras no tenemos la culpa de que el tenga que trabajar el día de año nuevo.
Envidio endemoniadamente a los de la clase business con sus cómodos y amplios asientos y a los que aun viajando de turista logran acomodarse en los brazos de Morfeo.
En un arranque de comunismo pienso que tal vez la clase turista fue inventada por los mas ricos, para que los de la clase media nunca olviden el lugar que ocupan en la sociedad: apiñados, incomodos y en la cola.
Mi primer pensamiento al subir al avion fue que a penas tuviera conexión a internet en mi destino vería la remota posibilidad de hacerle un pequeño upgrade a nuestro boleto de vuelta... Total en pedir no hay engaño dicen...
Lo otro que pienso es que si F estuviera aquí otro gallo me cantaría, nada de vecinos que odiar, simplemente abríamos subido el apoyabrazos y nos abríamos acurrucado juntos para hacer un rico tuto.
Por lo mismo también odio al tipo del counter por darnos estos asientos, como si ya volar 13 horas mas otras 3 extra de la conexión no fuera suficiente, nosotras no tenemos la culpa de que el tenga que trabajar el día de año nuevo.
Envidio endemoniadamente a los de la clase business con sus cómodos y amplios asientos y a los que aun viajando de turista logran acomodarse en los brazos de Morfeo.
En un arranque de comunismo pienso que tal vez la clase turista fue inventada por los mas ricos, para que los de la clase media nunca olviden el lugar que ocupan en la sociedad: apiñados, incomodos y en la cola.
Mi primer pensamiento al subir al avion fue que a penas tuviera conexión a internet en mi destino vería la remota posibilidad de hacerle un pequeño upgrade a nuestro boleto de vuelta... Total en pedir no hay engaño dicen...
Lo otro que pienso es que si F estuviera aquí otro gallo me cantaría, nada de vecinos que odiar, simplemente abríamos subido el apoyabrazos y nos abríamos acurrucado juntos para hacer un rico tuto.
De todas maneras es una suerte que Malú no hubiera organizado una protesta comunista contra los terratenientes de la primera clase, ya que sin duda las nada agradables azafatas de la línea aerea habrían tratado de arrestarla y conciendola, la cosa hubiera terminado en batalla campal y demanda judicial al llegar a destino.
Suerte Malú! te extrañamos y esperamos que vuelvas en primera clase o por lo menos más cómoda, y si no es así, te puedes entretener molestando al compañero de asiento "accidentalmente" y al menos de vuelta tendrás miles de buenos momentos que recordar para pasar el mal rato.