Algo que nos compete a todos
Entre otros, el tema del fin de semana recién pasado fueron las desafortunadas declaraciones que dio a la televisión una de las residentes del condominio que actualmente prohíbe la libre circulación de las nanas, jardineros y obreros en general por las veredas de dicho condominio. No les puedo linkear el video porque Canal 13 lo sacó de youtube.
Como no puedo mostrarles el video no voy a hablar específicamente de lo que dijo esta señora porque yo solo lo ví una vez y no recuerdo las palabras textuales. Pero si quiero hablar hoy de la situación en general porque francamente todavía no alcanzo a entender cómo es que pasan estas cosas en el mundo en que vivimos hoy. ¿No era que la humanidad estaba avanzando hacia un estado más espiritual? Parece que no TODA la humanidad va en esa dirección y ni siquiera se acerca a portarse con humanidad.
En cierto condominio en Quilicura, la administración del recinto emitió un comunicado donde se dispone que tanto las personas del servicio doméstico (nanas y jardineros) como los trabajadores de obra (construcción) no pueden circular libremente por las veredas y aceras del condominio, sino que deben ingresar a este y hasta su lugar de trabajo (casa de los patrones o construcción en la que estén laborando) a bordo de una van de acercamiento dispuesta por la administración con ese fin.
La finalidad que persigue la administración en este caso es -según ellos- disminuir la frecuencia de robos en las casas y eliminar la posibilidad de que aquellas personas ajenas al condominio puedan recolectar y/o comunicar información sobre las casas y habitantes del recinto. Hasta ahí todo bien…o más o menos bien. No suena mal.
Pero como decía mi abuela ¿para qué hacer cosas buenas que parecen malas? ¿por qué algo que debió haber sido manejado como un servicio a la comunidad (tanto de residentes como usuarios, nanas y trabajadores) terminó pareciendo una medida discriminatoria? A mi juicio son dos las razones: Primero, creo que hubo un grave error en la implementación del plan, que desde el principio estaba mal encaminado, ya que la iniciativa se llevó a cabo sin consultar a los vecinos y los encargados de llevarla a cabo fueron los guardias de seguridad, que según declaraciones de varias nanas, en cuanto se vieron con un poco de poder (¿cómo cual?) se sintieron amos y señores de la situación y comenzaron a tratarlas mal.
Segundo: se involucraron los medios informativos (desinformativos) que como siempre llegaron a empeorar las cosas, inflando lo malo y metiendo su cuchara en todos lados; funcionaron como atizador de leña hasta que crearon el incendio. A los noticieros y los canales de televisión no les interesa ayudar a nadie ni resolver la situación, ni luchar por los derechos de nadie porque eso no es negocio, y lo suyo es el negocio, y el negocio es crear polémica, hacer escándalo y alborotar, pero de servicio social (que ellos le llaman así) no tienen nada.
Mi humilde opinión es que si vas a contratar una nana, le das llave de tu casa, le confías a tus hijos y convives con ella a veces más que con otros miembros de tu familia, mínimo muéstrale el respeto y la confianza que se merece (y que con todo derecho se ha ganado) y si no confías en ella pues sácala de tu casa y púnto. ¿para que andarse con medias tintas que dan lugar a este tipo de situaciones?
*Por Mara
